domingo, 9 de marzo de 2014

Manipular el cerebro

Escribo este artículo para hablaros del vídeo sobre como manipular el cerebro, visto y trabajado en clase.
En este realizan un experimento para aprovechar la plasticidad del cerebro mediante interacciones ''no invasivas'' es decir sin uso de cirugía ni fármacos.
El experimento para cambiar la actividad del cerebro ya fue realizado hace unos años con zorras. Consistió en coger a las zorras que aguantaban más la presencia del ser humano y durante 30 años las estuvieron domesticando hasta cambiar sus conductas. A diferencia de ese experimento, el experimento del vídeo solo hace uso de unas horas y de una bobina de hilo de cobre en forma de ocho dentro de un plástico. A dicha bobina se le añade una corriente, la cual genera un campo magnético que será recogido por el conductor de electricidad protagonista del experimento, el cerebro. A esto lo llamamos estimulación magnética transcraneal. Estos estímulos no solo serían capaces de cambiar nuestra conducta si no también de recuperar recuerdos que a pesar de estar ahí algún día se perdieron debido a cualquier tipo de enfermedad mental y por consiguiente terminar con estas enfermedades.


La reflexión que he podido sacar de este vídeo es que en el futuro manipularemos nuestro cerebro y como consecuencia de esto podremos elegir como sentir y quienes ser, además de acabar con las enfermedades mentales, que en mi opinión es la única ventaja  realmente necesaria que tendría poder manipular nuestro cerebro, ya que ninguna enfermedad es deseada y en el caso de las mentales, esta tiene como consecuencia perder los recuerdos, perder una parte de nosotros. Hoy en día somos quienes somos gracias a nuestros recuerdos y experiencias. Son los recuerdos los que me hacen saber porque mis amigas son mis amigas, son las experiencias las que me ayudan a no repetir viejos errores, por tanto, si nuestro cerebro es incapaz de recordar esa información es como si empezáramos de cero.
Hacerme una idea de lo que sería perder mis recuerdos es lo que hace que no encuentre necesario cambiar mis sentimientos y mi capacidad de aprendizaje pero ¿qué esperar del futuro? Este vídeo me ha hecho entender que en el futuro no seremos nosotros quienes manipulemos a los robots, nosotros mismo seremos esos robots manipulados por la ciencia, decidiendo como sentir en uno u otro momento determinado.

Abrazarnos porque vamos a morir.

En el momento en el que mi cabeza se encontraba con la dificultad de elegir una sola experiencia entre muchas propuesta en un papel, me decanté con mis amigas en ''Abrazarnos a alguien porque vamos a morir'' ya que pensamos que sería divertido ir por la calle y abrazarnos a cualquier desconocido sin motivo alguno.
Días más tardes logré entender un poco en que consistía la experiencia y fue ahí cuando me di cuenta de que si había motivo, y no uno cualquiera.. vamos a morir.
Como mi gran amigo Quevedo (sólo por estas fechas de exámenes finales) solía decir, la muerte es la única verdad indiscutible, tarde o temprano llegará y cuando llegue no habrá vuelta atrás, solo quedará lamentar lo ocurrido. Pero cuando hablamos del termino ''muerte'' no todo termina ahí, cuando escuchamos o leemos el termino, o simplemente dedicamos unos minutos a apreciar el silencio en la cama, es ahí cuando preguntas sin respuesta como ¿Que hay después de la muerte? ¿A donde vamos? ¿Que vacío dejaremos en los nuestros después de que ese momento aterrador para todos haya llegado? rompen el silencio.
Aquí hago referencia a una de mis frases favoritas : ''La vida es una rueda y hay que girar con ella'' la muerte supondría salir de esa rueda y dejar que ella siga girando sin ti. Tras 17 años he aprendido a girar en esa rueda sin mis seres demasiado queridos, esos seres que como todos pensamos deberían ser eternos.
Por este motivo si me tengo que abrazar a alguien porque vamos a morir, pensándolo mejor, me abrazo a los míos y no al primero que me encuentre al salir del mercadona.
Fue entonces cuando después de una semanita chunga, abracé a mi hermano porque vamos a morir.
Salté encima suya y grite ''VAMOS A MORIIIR'', la experiencia no fue muy positiva ya que mi padre (que se encontraba  viendo el futbol en el lugar de los hechos) me mandó a callar y mi hermano (como buen hermano que es) acto seguido pronunció las palabras ''esta niña es tonta''. Las bonitas palabras de mi hermano hacen que para la próxima experiencia en relación con la muerte opte por abrazar al perro.
Esta experiencia a muchos les parecerá una tontería o pérdida de tiempo, ya que un simple abrazo no impedirá que la muerte se presente un día ante nosotros, pero ¿que mejor manera de darle la bienvenida que abrazando a los tuyos? ''Hay que aprovechar el momento'' es una frase un tanto monótona pero no por eso deja de ser una gran verdad.
Estoy casi segura de que todo el mundo tiene una lista de tareas pendientes por hacer y lo único que hacemos es esperar delante del móvil el momento ideal para hacer que estas dejen de estar pendientes. El momento ideal es hoy, no esperemos a un mañana que nadie nos ha prometido.